Tenía pensado traer otra cosa para este mes pero no podía dejar pasar por algo un hallazgo reciente: los lectores del blog antiguo seguro que recuerdan el coñazo que daban con un músico islandés llamado Ólafur Arnalds. Arnalds es un músico que toca varios instrumentos, especialmente piano, violín y arpa que aparte de tener su propia carrera musical lleva trabajando desde los 16 años para gente como Björk, Sigur Ros, Mogwai, Múm... También ha hecho la banda sonora de Los Juegos del Hambre y de la serie Broadchurch (bastante recomendable la serie, por cierto) aparte de ser un habitual de la televisión islandesa (sí, igual que en España que tenemos a Belén Esteban ya que sólo nos falta que se nos aparezca en sueños). En su último disco The Chopin Project, publicado hace un par de semanas, Arnalds no está solo sino que junto con la pianista alemana Alice Sara Ott ha creado unas versiones muy personales de alguna de las obras más conocidas del inmortal compositor polaco. Curiosamente Chopin es mi compositor de clásica favorito. Llevo siguiendo a Arnalds desde hace unos diez años (y no sacó su primer disco hasta 2007) y pese a que en esta ocasión no está solo (siempre ha grabado él mismo todos los instrumentos para sus discos, a excepción del último) no ha perdido ni un ápice de su arroladora personalidad.
Y como en esta ocasión siempre incluyo algo de material propio por parte del versionador de turno en este caso no podré un tema propio sino dos. El primero es So Close, de la banda sonora de Broadchurch, para el que cuenta con la voz de Arnór Dan, el cantante de Agent Fresco. El segundo es un tema de For Now I Am Winter, su último disco, en el que por vez primera colabora con una orquesta y también por vez primera algunos temas tienen voz (otra vez a cargo de Arnór Dan). El propio Ólafur ha dicho en varias entrevistas que no veía viable hacer música vocal porque cree que la voz le resta fuerza a los instrumentos pero que no descartaba hacer alguna que otra pieza vocal si encontraba una voz que encajase con algunas ideas que tenía.
Through dark and light I fight to be
So close, shadows and lies mask you from me
So close, bathe my skin the darkness within
So close, the war of our lives no one can win
The missing piece I yearn to find
So close, please clear the anguish from my mind
So close, but when the truth of you comes clear
So close, I wish my life had never come near
So close.
Through dark and light I fight to be
So close, shadows and lies mask you from me.
For now I am winter
Lungs debut
Ufff que no digo yo que no sea bueno, pero demasiado intenso esto para mi.
ResponderEliminarBueno, que aunque esto sea la república independiente de mi blog si os parece un mojón como un castillo lo podéis decir jajajaja.
EliminarAbrazotes.
Esto si que no lo conocia. Coincido un poco con desgayficiando... demasiado para mi...
ResponderEliminarAunque me encanta Arnalds también es demasiado para mí. En mi caso demasiado minimalista pese a la cantidad de pistas que tiene que llevar cada tema.
EliminarMe tengo que sumar a la opinión´de los dos amigos anteriores, esto es too much para un hombre chochipop como sabes que soy yo. Aún así de los tres temas te diré que el que más bonito ha sonado a mi oreja profana ( y también el más "fácil" de escuchar ) ha sido ese primer "Reminiscence", aunque al final me ha acabado produciendo como mucha tristeza...
ResponderEliminarUn abrazo, guapo.
Es que es una versión muy bonita y muy bien llevada pero sí que es cierto que la música así tan minimalista y austera acaba pegando irremisiblemente de tristona.
EliminarAbrazotes.
Me encanta me encanta. Les falta la lluvia de fondo, una ventana empañada y una taza de té caliente, para esos días de invierno (aquí todavía parece que el verano no se ha ido). Yo lo conozco al autor gracias a tu antiguo blog, y lo añadí a mi lista de nórdicos a no perder la pista junto a Sigur Rós y Tord Gustavsen, aunque últimamente estoy muy vago para buscar nueva música, me basta con cualquier Reich o John Adams a todo volumen :-)
ResponderEliminarAnda que lo del ex de tu churri también, cuánto tarado hay suelto...
Besotes!
Sí, tiene un punto muy invernal y brumoso, como de día con niebla en el que sólo te apetece ponerte la batamanta (o la bata o la manta, a gusto de cada cual) y tener una taza caliente delante.
EliminarBesotes y descuida, que el invierno seguro que no tarda en llegar a aquellas tierras.
Uyy, me gusta. No lo conocía (de todos los que dices, sólo conozco a Björk y alguna cosa de Sigur Ros) y me ha gustado, en especial Reminescence. Ojito a los mozos... ejem, que me pierdo...
ResponderEliminarPues eso, que sí me ha gustado Olafur. Para de vez en cuando. O para tener bajito de fondo a ratos en el trabajo y aislarse un poco.
Con respecto a los mozos (sabía que te iban a gustar) me sorprende que nadie haya reconocido al primero. Pero sí, la música de Arnalds es tan especial que no es apta para cualquier momento ni para cualquier estado de humor. Aunque con lo happy que eres me ha sorprendido que te haya gustado.
EliminarAbrazotes.
Ya conocía a Ólafur Arnalds, me lo descubrió una excompañera de trabajo. Es una música para el final del día cuando ya estoy cansado, junto con Enya y cosas parecidas. Para las mañanas necesito algo más animado.
ResponderEliminarUn saludo.
Justo, el rollo neoclásico/etéreo viene muy bien para cuando uno quiere descansar un poco las neuronas. Aunque yo para las necesidades musicales soy muy anárquico, lo mismo me apetecen ahora Deftones que dentro de un rato me da por Hurts.
EliminarAbrazotes.
Buen post, reflexivo e interesante. A Ólafur Arnalds no lo conocía.
ResponderEliminarVaya extraña coincidencia, Chopin siempre ha sido uno de mis favoritos.
Saludos.
Ya digo que tenía pensada otra cosa pero fue encontrarme con el disco este y tener que dedicarle el post. Al igual que lo era Chopin, Arnalds es un genio.
EliminarNo lo conocía, y no está mal para ciertos momentos, pero ahora estoy en modo-cani-on así que lo dejaré para otra ocasión.
ResponderEliminarAy el hombretón del vídeo...