23 oct 2015

Volver la vista atrás

Esta misma mañana estaba con N comprando unas entradas para un concierto cuando se nos ha acercado un chico que fue a su clase en el instituto. Como ni me iba ni me venía me dediqué a mirar al frente mientras estaba con la antena puesta y entre lo tenso que se puso N cuando lo vio y que no se molestó en presentarnos intuí que era un encontronazo no deseado. Una vez me dejó caer que le hicieron bullying en el instituto pero no le hice preguntas al respecto porque noté que le resultaría incómodo pero en este caso en cuanto se fue dijo "Ése es uno de los mayores hijos de puta que nunca me he cruzado, a veces me gustaría ser tan políticamente incorrecto como tú y haberle mandado a tomar por culo cuando se me ha acercado".

Se puso a contarme lo que pasó en aquellos años y me dio que pensar. Más de una vez he contado que mi infancia fue bastante atípica porque tuvimos muchos cambios de residencia, no ya entre diferentes ciudades sino incluso en otros países. Aunque lo veo como alguien bastante positivo porque gracias a eso vi mundo y desarrollé una capacidad de adaptación que me ha venido muy bien con el paso de los años pero en su momento no me hizo ni puta gracia, hasta el punto de que mi paso por todas aquellas ciudades y aquellos colegios era como el de un fantasma porque pensaba "Total, si sólo voy a estar un año aquí para que me voy a molestar en conocer gente". Pero eso no quitaba que, aunque guardando las distancias, tuviera cierta relación con los diversos compañeros que tuve durante el devenir de aquellos años sí que fui testigo de como le hacían bullying a otros y aunque nunca me metí ni estoy de acuerdo con esas cosas ni aún en aquellos años le encontraba mucho sentido a eso de putear a otros porque sí.

Bastante tenía yo con llevar el ritmo de tener una mudanza y un cambio de aires nuevo cada año e incluso con tener que afrontar un clima al que no estaba acostumbrado, un idioma que me pilló totalmente desprevenido (y que terminé siendo el que más pronto aprendió a hablarlo de la familia) y unas costumbres que ni siquiera conocía. Echando la vista me doy cuenta de que aunque la mía no fue una infancia como la del resto fui bastante estúpido tomándome la situación tan a la tremenda porque mis primeros amigos no los tuve hasta los 15 años por no querer saber absolutamente de nadie. También me he dado cuenta con el paso del tiempo de que todos en algún momento de nuestra vida hemos sido víctimas pero también verdugos, no ya en cuanto al bullying sino en general. ¿Habéis sufrido algo así alguna vez? Voy a hacer una pregunta un poco fuerte pero, ¿por el contrario alguna vez habéis estado en la otra parte?

Me ha surgido un imprevisto y hasta el día 6 de noviembre no voy a poder contestar a vuestras preguntas por lo que los rezagados que quieran preguntarme algo tienen de plazo hasta el día 5. Al igual que he hecho siempre podéis participar todos los que queráis pero es muy importante que me mandéis vuestras preguntas por correo, mensaje privado (si me tenéis en alguna red social) o WhatsApp. El motivo ya lo expliqué en su momento y es que quiero que vuestras preguntas sean un enigma para los demás hasta el momento que publique todas las preguntas y todas mis respuestas. 

Do you ever feel like a plastic bag
Drifting through the wind, wanting to start again?
Do you ever feel, feel so paper-thin
Like a house of cards, one blow from caving in?

Do you ever feel already buried deep?
Six feet under screams, but no one seems to hear a thing
Do you know that there's still a chance for you?
'Cause there's a spark in you

You just gotta ignite the light and let it shine
Just own the night like the Fourth of July

'Cause baby, you're a firework
Come on, show 'em what you're worth
Make 'em go "Ah, ah, ah!"
As you shoot across the sky-y-y

Baby, you're a firework
Come on, let your colors burst
Make 'em go "Ah, ah, ah!"
You're gonna leave 'em all in awe, awe, awe

You don't have to feel like a waste of space
You're original, cannot be replaced
If you only knew what the future holds
After a hurricane, comes a rainbow

Maybe the reason why all the doors are closed
So you could open one that leads you to the perfect road
Like a lightning bolt, your heart will glow
And when it's time you know

You just gotta ignite the light and let it shine
Just own the night like the Fourth of July

'Cause baby, you're a firework
Come on, show 'em what you're worth
Make 'em go "Ah, ah, ah!"
As you shoot across the sky-y-y

Baby, you're a firework
Come on, let your colors burst
Make 'em go "Ah, ah, ah!"
You're gonna leave 'em all in awe, awe, awe

Boom, boom, boom
Even brighter than the moon, moon, moon
It's always been inside of you, you, you
And now it's time to let it through

'Cause baby, you're a firework
Come on, show 'em what you're worth
Make 'em go "Ah, ah, ah!"
As you shoot across the sky-y-y

Baby, you're a firework
Come on, let your colors burst
Make 'em go "Ah, ah, ah!"
You're gonna leave 'em all in awe, awe, awe

Boom, boom, boom
Even brighter than the moon, moon, moon
Boom, boom, boom
Even brighter than the moon, moon, moon

12 comentarios:

  1. Yo sí lo he sufrido y no siento ningún deseo de volver a traer a la memoria la experiencia ni siquiera para hablarte de ello ahora. Solo puedo decir que me hubiera sido imposible ser tan politicamente correcto si me ocurriera lo que le pasó a N. Por suerte las escasas veces que me cruzo con alguno de ellos no me dirigen la palabra -por vergüenza me supongo- y no me veo en la situación de tener que mandar a nadie a ningún sitio oscuro.
    Abrazos, y buen fin-de, guapo.

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    1. Bueno, como es un tema truculento tampoco es plan de ponerse a dar detalles si no queréis. Además hay cosas que tampoco necesitan mucha explicación y yo creo que este tema es uno de ellos. Aunque estoy de acuerdo contigo, si no te dirigen la palabra seguramente sea por vergüenza y por lo violento y raro que puede ser que de repente le hables a alguien a quien has puteado.

      Abrazotes y buena semana.

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  2. A mí también me hicieron pasar las de Caín de crío. He de reconocer que era un poco repelente, pero el hecho de ser muy pequeño y delgado y que no pudiese devolver los guantazos hizo bastante más que lo primero. Porque si alguien cae mal lo mandas a paseo, no te dedicas a buscarlo para hacerle la vida imposible.

    Lo peor es que no fue cosa de una persona o un grupo; fueron varias veces y en diferentes entornos, lo que trajo una consecuencia de la que no me siento orgulloso: que asumiese ese odio como el camino a seguir para ser "normal" y lo repitiese con otras personas. Luego ya, con unos 14 años me di cuenta de ello y no lo llevé más lejos. Sin embargo, yo tuve que aguantar carros y carretas incluso de gente con la mayoría de edad cumplida hasta que me fui a Madrid a la universidad.

    Para más inri, el que peor me lo hizo pasar era un compañero de curso y el hijo de una compañera de trabajo de mis padres y con la que siguen teniendo trato, que de vez en cuando llama a casa y me cuenta lo que hace el susodicho. Con el paso del tiempo, he llegado a la conclusión de que si yo fui capaz de madurar y recapacitar quizás los demás hayan hecho lo mismo, con lo cual tiendo a tener un comportamiento correcto (aunque distante) si me encuentro con alguien. La excepción es esa persona, ya que me encontré con él hace unos seis años y me pareció muy antipático. Una vez aguanto las cosas a la gente, la segunda ya no.

    Otra consecuencia es que me fui encerrando en mi mismo hasta reducir mis relaciones al mínimo. A Dios gracias que pude dejar el pueblo y romper ese círculo vicioso. Hoy en día guardo gran amistad con dos personas de tiempos de la EGB/BUP (y que también han pasado por lo suyo). Con los demás rompí todos los lazos el día que acabé la Selectividad y me marché. De vez en cuando me dice mi hermano que se encuentra con alguien y preguntan por mí; yo ya no pregunto por nadie.

    Y todo eso sin tener la etiqueta de "maricón".

    Un saludo.

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    1. Partiendo de que no tuve una infancia normal en tanto a que lo normal es que a uno le entre el nomadismo cuando empieza la universidad o se incorpora al mercado laboral. Cuando pienso en como lo gestioné me veo muy estúpido porque podría haber aprovechado mejor la situación en lugar de cerrarme en banda y hacerle el vacío a todos. Por ejemplo cuando vivía en Noruega le contestaba a mis compañeros a todas las preguntas que me hacían pero no iba a los cumpleaños a los que me invitaban y cuando no estaba solo en los recreos tampoco me molestaba en interactuar con el resto a no ser que fuera estrictamente necesario. Y eso que yo también era muy repelente.

      Menos mal que aquella etapa la has dejado muy atrás.

      Abrazotes.

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  3. Pues yo tristemente he de decir que siendo pequeño si que puede que tuviera un momento que bordeo el tema bullying con un vecino al que todos le teníamos mucha manía y se lo hacíamos pasar un poco mal, visto a día de hoy pienso que eramos niños de 7-8 años que son crueles sin maldad, pero es cierto que si lo pienso es algo con lo que me siento incomodo.
    Más adelante por suerte nunca tuve ningún episodio contra mi de ese tipo y por suerte ya tenía la cabeza más asentada y cuando veía un caso de éstos en vez de participar intentaba mediar y solucionarlos para que dejaran de acosar al pobre chaval, algunas veces con más suerte que otra.

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    1. Bueno, creo que lo tuyo no es aplicable por dos motivos: primero porque era alguien a quien le tenías manía (eso nos ha pasado a todos) y no alguien con quien te cebases porque le veías débil. Y segundo porque eres muy noblote y no te veo en plan acosador, de hecho te sientes mal al recordarlo y eso dice mucho de ti.

      Yo al principio pasaba de meterme en historias que no me incumbían pero más adelante he hablado con los acosadores de turno para hacerles ver que esa no es forma de tratar a la gente. Sólo una vez me hicieron caso, el resto de veces me escuchaban pero luego no tomaban en cuenta mis palabras.

      Abrazotes.

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  4. No recuerdo fenómenos de bullying en mi época en los colegios a los que fui. Siempre en cada curso había alguien con el que los abusones se metían a ratos, pero yo jamás lo percibí como acoso. Conmigo también, a veces (y sí, me llamaban maricón), pero lo que hacía era refugiarme en mi grupo de amigos, donde yo era un pequeño lidercillo a mi manera. Hace unos años tuve una reunión de amigos del cole a la que no tenía pensado ir, pero luego me dije que qué cojones, tampoco pasaba nada por ir. Y fue todo muy light.

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    1. Bueno, un colegio en el que estuve parecía Battle Royale, todos se puteaban a todos y precisamente por eso no lo considero bullying. El bullying siempre lo he visto como algo muy selectivo.

      Abrazotes.

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  5. Yo, más o menos, fui víctima de bullying, pero vamos a ninguno de esos imbéciles que me lo hacian se les ocurriría saludarme. ¡Hay que ser borderline! Por cierto, lo de las preguntas me intriga y a la par me da ganas de enviarte alguna pregunta burra. jajajaja.

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    1. Claro que sí, atrévete y participa. Y no te preocupes sobre las preguntas que ya hace años un lector que tenía del blog anterior se dedicó a hacerme preguntas de índole sexual. Y por supuesto contesté, no creo que la censura lleve a nada, aunque reconozco que me molestó un poco bastante que a uno de mis lectores SÓLO le interesase mi vida sexual. Date prisa que el 5 es el último día. ;)

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  6. Que recuerde, ni he sufrido ni he hecho sufrir nada parecido.

    De pequeñajo era flacuchillo, no especialmente alto y, ohhh cielos, jugaba de puta pena al fútbol, así que lo peor que me podía pasar era ser seleccionado entre los últimos diez de la clase a la hora de hacer los equipos de fútbol en clase de gimnasia (en mis tiempos no existía la Educación física; se llamaba ginnasia). Por eso y alguna rima con mi apellido vasco sí me gané algún "Mariquita" (conste que en aquel entonces, no era ni mari ni un supermachote ni nada de nada). Luego las cosas cambiaron, crecí, aparecieron el baloncesto, el balonmano, el tenis y hasta empecé a jugar decentemente al puto fútbol... Además, sacaba una notas bastante buenas (lo mío me costaba, vayas palizas a estudiar), así que en BUP y COU, nada. Y después, salvo una jefa loca... tampoco.

    Lo de la loca de mi ex-jefa es la excepción: nos hacía la vida imposible a unos cuantos; a una compi logró echarla (y que acabase yendo al psico y al psiqui; principalmente cayó en desgracia por liarse con un compi que le caía como un tiro); a otra, casi; a mí me tenía ya en la lista y pasé de ser su ojito derecho a estar en el eje del mal... sí recuerdo ir corriendo por los pasillos con la loca persiguiéndome, llegar llorando al registro, llamar para que me fueran a buscar por estar temblando en el despacho... En fin. Una loca que ahora pretende hacerse la simpática pero a la que no hablo y de la que sé que me la tiene guardada, igual que yo se la tengo guardada a ella. Así que ahora, cada uno en su espacio y, por mi parte, cuanto menos trato, mejor.

    A la inversa, creo que no le he hecho esas putadas a nadie, excluyendo a un profesor de la Facultad, al que luego nunca he saludado. Él se lo buscó. Me puso un 1, me hizo repetir y me llamó subnormal en público... me vengué sacando Matrícula de honor un año después y sin saludarle nunca más. Luego me enteré de que tenía unos problemones enormes en casa.

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    1. En mi caso los problemas que he tenido con otra gente se han debido más a mi carácter o a que cada uno tenía cosas distintas en mente pero no a que me quisieran putear, creo.

      He flipado en colores con tu ex-jefa porque ahí tienes el añadido de que no puedes hacer como cuando te encuentras alguien tóxico en la calle, que pasas de él y ya. Con el jefe hay que lidiar sí o sí, pero menos mal que es ex-jefa.

      Abrazotes.

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