21 ago 2016

Mitt liv i Norge II (Costumbrismo nórdico)

Sigo haciendo un repaso a los años en los que viví en Noruega y en esta ocasión me voy a centrar en su idiosincracia y en algunas cosas que han cambiando con el paso de los años debido a la propia evolución que ha sufrido la sociedad nórdica en los últimos años y que les ha llevado a, por poner un ejemplo, acabar cambiando sus políticas de extranjería.

Los noruegos están acostumbrados a tener extranjeros en el país pero hasta hace unos pocos años era común tener ciudadanos africanos, asiáticos o latinoamericanos en sus ciudades pero no gente de otros países europeos. Ahora hay en Noruega sesenta veces más ciudadanos europeos que hace ocho años pero ya profundizaré en ello en un próximo post.

Una de las cosas que más me chocaron al mudarme a Noruega es que los noruegos fluctúan entre una educación que roza lo aséptico y una sinceridad que a veces entre en el terreno de lo hiriente. Por ejemplo: una de las cosas que se consideran de peor gusto en Escandinavia es rechazar algo que te han ofrecido de comer o de beber. ¿Qué te han ofrecido un café y ya llevas cinco en todo el día? Pues que se joda tu sistema nervioso pero las formas no se pierden. ¿Qué han puesto de picar frutos secos y eres alérgico? Hombre, no te van a obligar a comer en eso pero se encargarán de recordarte la afrenta per secula seculorum a la par que te recuerdan que allí lo habitual cuando conoces a alguien aparte de presentarte diciendo tu nombre, tu edad, de dónde eres, dónde trabajas/estudias también hay que decir si eres alérgico a algo o si simplemente no consumes un determinado alimento por si no te gusta. Lo hacen para precisamente evitar futuribles malentendidos. Al principio me extrañaba cuando gente que no conocía de nada me preguntaba si me gustaba el queso, o los arenques o las patatas pero enseguida me habitué.

Eso sí, si le regalas a un noruego algo que no es de su gusto te lo hará saber con absoluta claridad. ¿Recordáis que hace un par de meses le regalé una botella de vino a una recepcionista sueca y me la rechazó por ser vegana? Pues es algo muy habitual por allí que cuando te equivoques haciendo un regalo te digan "ah, si yo ya tengo esto" o "no como esto otro pero se lo ofreceré a mis visitas". Aclaro que esta forma de actuar no es porque los nórdicos quieran ser los más desagradables del mundo sino porque forma parte de su idiosincracia que cuando alguien se equivoca se le dice para evitar que en el futuro incida en aquello en lo que ha errado.

Ah, y una cosa que para un noruego está peor vista aún que el que le rechaces un café, una copa o un cuenco de patatas fritas. Y es que en Noruega está muy mal visto que, por ejemplo, llegues al médico y digas "Hola" al llegar a la sala de espera. Sí, una inocua palabra de tres letras (Hej) te puede condenar a la ignominia y al ostracismo porque los noruegos sólo se relacionan con la gente que conocen y jamás se les pasaría por la cabeza hablarle a un completo desconocido porque para ellos es un signo bastante evidente de que esa persona es emocionalmente inestable y no está bien de la cabeza. Sí, seguro que os habéis quedado igual de ojipláticos que yo cuando lo ví por primera vez, las mujeres aferrándose a sus bolsos por si acaso, los hombres mirando para otro lado evitando el contacto visual a toda costa y los niños escondidos detrás de las piernas de sus progenitores, pero por suerte es algo que los noruegos están cambiando últimamente.

Otra de las peculiaridades de los noruegos las encontramos en el transporte público. Tiene un punto cómico eso de subir a un autobús noruego y comprobar que todo el mundo está sentado en su asiento pero que en el asiento de al lado ponen el bolso, la mochila, el abrigo... Cualquier cosa para evitar que se te siente un desconocido al lado y cometa la vulgaridad de darte conversación. Reconozco que en cierto modo les entiendo porque aunque soy alguien sociable soy muy celoso de mi espacio y no me gusta que lo invadan así porque sí pero tampoco llego al punto de los noruegos. Si quieres sentarte en un asiento específico y resulta que está ocupado por las pertenencias te dirá con todo su papo que hay asientos vacíos y seguirá a lo suyo.

Este amor hacia su espacio personal contrasta con lo locuaces que pueden llegar a ser. Normalmente un "¿Cómo estás?" lo tomamos como un "Hola" pero un noruego se lo tomará de manera literal y te contará con todo lujo de detalles el estado actual de su relación de pareja, que el perro se ha puesto malo, sus movidas laborales e incluso lo que les ha parecido el último disco de Coldplay o la última peli de Woody Allen. Pero eso sí, jamás te atrevas a cortar a un noruego, se lo tomarán como un ofensa personal y harán saber a todos que eres un monstruo sin corazón que te interesas por su vida para luego cortarles la exposición.

Da igual que te duela la cabeza, te hayas roto un dedo o tengas leucemia. Para un noruego absolutamente todo se puede curar con ibuprofeno y aceite de hígado de bacalao (tran).

Ahora vamos a ponernos en una situación muy habitual: estás en un bar con tus colegas y uno se va porque está cansado, porque tiene que madrugar o simplemente porque quiere irse. Lo normal es despedirse, ¿no? Pues en Noruega olvídate de eso y no te enfades cuando alguien del grupo se levante y se vaya sin decir palabra. Es verdad que para decir "Adjø" no hace falta destruir un anillo mágico en un volcán pero los noruegos son así. Ah, lo que aquí llamamos "despedida a la francesa" ellos lo llaman "despedida irlandesa" (Irish farvel).

Es muy raro escuchar un "Vær så snill" (por favor) pero en cambio el "Takk" (gracias) lo usan para todo y allí el usted no sólo no se lleva sino que a todo el mundo se le habla de tú y por su nombre, nada de señor tal o señora cual, para los noruegos el respeto a la jerarquía se hace a través de las acciones, no de la palabra.

Cuando llegues a casa quítate los zapatos. Los suelos suelen ser muy delicados y la nieve o el barro los estropean enseguida por lo que si vas a casa de alguien y por el motivo que sea no quieres quedarte descalzo o en calcetines es mejor que te lleves unos zapatos que sólo usarás para interior pero nunca para la calle.

Es muy raro encontrarse con gente que fuma, los noruegos en lugar de cigarros usan snus, unas bolsitas como las del té pero algo más pequeñas que se ponen debajo del labio, las bolsitas no son para morder ni masticar porque si se rompen te dejarán las encías negras, sólo tienes que dejarlas ahí para que el tabaco se vaya infiltrando.

Hay otras costumbres que quiero dejar para más adelante porque tienen que ver con temas muy determinados pero quiero destacar una última cosa que me pareció muy curiosa. Estás en clase o en el trabajo y te has llevado un bocadillo, lo habitual es llevarse el bocadillo ya hecho, ¿verdad? Pues en Noruega olvidaos, allí la gente se lleva el pan y el queso o el embutido y se hacen el bocadillo en un momento. ¿Que eres más de mantequilla y mermelada? No pasa nada, te llevas el bote de mantequilla, el de mermelada, un cuchillito para untar y listo. ¿Quieres un café o un colacao sin exponerte a la clavada de la cafetería? Tampoco hay problema, te llevas tu taza, la leche, el nescafé, el colacao o lo que sea y te lo haces en un momento. Puede sonar muy raro pero con esos precios es normal que mucha gente en Noruega crea que ir a la cafetería es un lujo.




Poses, poses
That's all you are to me
Roses, roses
That's all you're offering me

And now I wish to God that the earth would turn cold
And my heart would forget it's made of glass
And all the pretty tulips would disappear
And never disturb me again

You gave me my very first gun
I'll go out and hunt the hidden dome
With white foxes, with white foxes
Freeze

Hunger, hunger is the purest sin
It is an empty church and crowded inn
I've wept and I've stumbled
I fought and I've craved
For the gravy of your soul
But all I wanna do now is walk along
Down barren trees in fields of snow

You gave me my very first gun
I'll go out and hunt the hidden dome
With white foxes, with white foxes
Freeze, freeze

My eye is my sanctuary

23 comentarios:

  1. Hombre, pues entonces ya sabemos de donde te viene esa sinceridad aplastante que gastas, no? jejeje
    Me ha alucinado mucho que eviten tanto el contacto físico con los demás y que para ellos cualquier persona que aqúi podría considerarse amable, para allí sea justamente lo contrario.
    Creo que me quedo entonces con la mentalidad latina, que tendrá sus cosas malas, pero también muchísimas cosas buenas.
    Saludos.

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    1. Jajajajajaja, hombre, teniendo en cuenta que me crié allí sí que es verdad que tengo muchas cosas de ellos. Precisamente en lo único que choco con ellos es en esa especie de fobia social de la que se van desprendiendo poco a poco.

      Abrazotes.

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  2. Tengo un problema: no me gusta ni el café,ni la cerveza, ni el vino, ni la Coca Cola, ni la tónica, ni la gaseosa. Y lo peor de todo: odio el salmón ahumado.

    Mejor me voy buscando otro país que visitar.

    Un saludo.

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    1. Te veo en Noruega con un taco de folios en los que llevas escrito todo lo que no te gusta, como si fueran un manual de instrucciones jajajaja.

      Abrazotes.

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  3. ¡Qué horror! ¿Los noruegos también comen niños? En serio, he leído tu post y me he meado de la risa, pero también he tenido un shock cultural brutal. Se me han quitado las ganas de visitarlo y todo, Christian. ¡Por favor1 El siguiente post que sea de aspectos más... positivos desde el punto de vista de un españolito.

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    1. Jajajajajaja, sabía que iba a provocar este tipo de reacciones. De primeras choca mucho su forma de ser pero luego te das cuenta de que tienen otro sistema para hacer las cosas.

      Normalmente cuando hago un post hablando sobre cualquier cosa prefiero mostrar las cosas tal y como son o al menos como yo las veo, y eso implica que a veces hable de cosas negativas o que hable tanto de lo bueno como de lo malo pero no te preocupes, seguro que las siguientes partes te van a gustar más.

      Abrazotes.

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  4. En sociedades que casi no han experimentado mezcla de razas las costumbres son por decirlo de alguna manera particulares; el paso del tiempo tiende a globalizarnos, en algunos casos para bien en otros no tanto. Como soy curioso me gusta visitar pueblos que conservan tradiciones, y me parece que corresponde adaptarse. Me encantaría conocer Noruega y Suecia. Muy interesante tu crónica. Besos
    Ayax

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    1. Ya lo desarrollaré más en un post que haré sobre como se relacionan los noruegos con los extranjeros pero sí que te adelanto que a los extranjeros no les llama mucho mudarse allí, no tanto por el clima sino por la falta de horas de luz (de eso también hablaré más adelante). Aparte casi todos los extranjeros que van son matrimonios por lo que realmente hay pocos extranjeros solteros que den lugar al siempre interesante mestizaje.

      Si alguna vez vas no dudes en preguntarme y te daré algunas recomendaciones.

      Besotes.

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  5. Totalmente de acuerdo con algunos de los comentarios. Pese a no tener nada en común con ellos (quizás algunos de mis ascendientes pero es un dato perdido en el tiempo) me gustaría conocer los países nórdicos. Obviamente, su idiosincracia es muy diferente a la nuestra (la latina) pero ésta, también es diferente a muchas otras.
    Muy bien por vos y la rápida sinopsis del país nórdico pero me gustaría conocer también como se desenvuelve un extranjero en el ambiente gay de ese país y con qué cosas diferentes te podés encontrar, teniendo en cuenta ciertas características muy nuestras.
    Besos!

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    1. Te adelanto que los próximos posts sobre Noruega irán, por este orden, sobre: extranjería, mundo gay, clima y comida. Sobre todo en cuanto a extranjería y mundo gay vais a ver que los noruegos son muy de contrastes y por supuesto basándome en como somos los mediterráneos y los latinos.

      Besos.

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  6. Todo es cuestión de costumbres y está claro que las suyas y las nuestras, en cuanto a sociabilidad, no se parecen en nada. Ahora, la pregunta que me queda es, si no hablan con extraños, ¿cómo conocen gente? ¿sólo previa presentación? ¡Qué complicación!

    PD: una duda mía personal y algo rara, ¿saludan a los vecinos? No digo contarles su vida, sólo saludar.

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    1. Lo más normal es que haya alguien que hace de intermediario y presenta a dos personas o que acabes haciendo amistades con alguien aprovechando que tenéis cosas en común.

      Dicho de otra manera, puedes conocer a alguien en el trabajo, en clase o en el gimnasio pero no esperes conocer a alguien en lugares más "neutros" como el autobús, el supermercado o la oficina de correos.

      Jajajajajaja no, ni siquiera saludan a los vecinos a no ser que haya una previa amistad. Lo más normal es que hagan como si no existieras o, si ven que quieres hablarles, mirarán para otro lado para dejarte claro que no están por la labor pero parece que últimamente están más receptivos a esa brujería extranjera que es lo de socializar.

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  7. Puede parecer negativo pero me ha gustado. He estado fuera medio verano, en Irlanda, y lo del transporte público y pertenencias en el asiento de al lado me ha resultado cómica porque yo mismo me he apartado de asientos con cosas por "si molestaba", por eso no lo veo tan raro; aunque han habido varias veces que sí he pedido sentarme porque no habían más asientos libres.

    Justamente hoy han dicho en las noticias algo sobre Noruega y al acabar en tu blog (te leo desde hace un par de meses) y leer esto me ha resultado curioso xD. La noticia era por una obra que quieren hacer por todo el país y esté así "más conectado y accesible".

    En general lo he visto con buenos ljos y una actitud algo "curiosa". Yo mismo soy cerrado también para relacionarme.



    James

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    1. Para mi tampoco es negativo, de hecho mientras iba recopilando estas costumbres para el post me he visto reflejado en casi todo salvo en lo del tema sociabilidad.

      No sabía lo de la obra esa pero ya era hora, lo peor de Noruega son sin duda las carreteras pero con un terreno tan accidentado es más complejo hacer una obra así.

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  8. Gracias por mostrarnos cosas sobre Noruega!, lo cierto es que la que mas me ha gustado es la de su sinceridad. Eso les convierte en seres terriblemente prácticos.

    Por otro lado me ha servido para reirme un rato imaginándome las reacciones de los Noruegos frente algunos españoles que hayan sacado sus costumbres propias. Como decía alguien en un perfecto inglés mientras esperábamos en la cola "Estos españoles siempre metiéndose en todo"

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    1. Sí sí, no se andan con muchos rodeos y eso hace que relacionarse con ellos sea más fácil de lo que en principio parece.

      Mis amigos noruegos están teniendo un choque brutal porque con la crisis se ha ido mucha gente allí y me dicen que soy un español muy raro porque no hablo a ratos, ni interrumpo a la gente cuando habla, ni me meto en la vida de los demás...

      Abrazotes.

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    2. Bueno y muchas mas cosas que podrían decir... eres una joyita ;-)

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    3. Muchas gracias, también tengo mis defectos no te creas jeje.

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  9. Voy a geolocalizar el Grindr en Oslo a ver qué hay de todo esto....

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    1. Curiosea pero no te guies mucho por lo que cuento en el blog porque los noruegos se transforman como gremlins cuando van de caza. Ya hablaré en otro post del mundo gay por allí.

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  10. Me he reído bastante con lo de llegar a la consulta del médico, decir "Hola" y que todo el mundo se quede acojonado, jajajaja, es increíble ver como a pesar de ser dos países europeos podemos ser tan distintos en algunas cosas...
    Esta Susanne Sundfor es la que sacó ese disco de "Ten love songs" donde salía una que oí yo bastante no hace mucho que se titulaba "Kamikaze", ¿verdad?...pues me gusta un montón esta mujer, caray.
    Un abrazo guapete.

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    1. Jajajajaja, sí, es una escena un tanto surrealista pero muy común por allí. Lo habitual es estar a tu bola y callado como una puta a no ser que alguien te diga algo.

      A Susanne Sundfør la tienen considerada como la Björk noruega (aunque creo que Aurora le va a quitar el puesto). Esta canción es de su disco anterior.

      Abrazotes.

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  11. Todo, todito me gusta jajajjaj
    También choca mucho que si entras en un café o un pub y te sientas solo en una mesa con cuatro asientos, es muy normal que ocupen los asientos libres de la misma mesa sin el menor recato y sin pedir permiso. Eso sí, te ignoran y siguen con su conversación como si no hubiese nadie jajajja.. pero, hay modos y meneras muy sutiles para hacerte notar y eso convierte la escena en algo fascinante, al menos para mí.
    El clip de vídeo y el tema me han gusta mucho.
    Abrazos.

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